La otitis se define como la inflamación de cualquier componente del oído de nuestra mascota incluyendo el pabellón auricular, el conducto auditivo externo y el oído medio. La otitis externa, la cual normalmente observamos, comprende sólo el pabellón auricular y el conducto auditivo externo y es un problema bastante común en nuestras mascotas.
Signos comunes ¿Cuándo sospechar de otitis?
-Sacudido de cabeza
-Picazón de oídos
-Dolor al tocar la zona
-Otro perro lamiendo el oído de mi perro
-Inflamación, cambio en la coloración y/o presencia de secreción en el oído.
-Cabeza inclinada (en casos más avanzados)
-Mal olor
Causas:
La causa de la otitis externa es MULTIFACTORIAL, existiendo las causas primarias, los factores predisponentes y los factores perpetuantes. Dentro de las causas primarias encontramos más comúnmente las alergias, tanto a la proteína animal (Alergia Alimentaria) como al ambiente (Dermatitis Atópica), siendo la más común la alergia al alimento. Otras causas primarias incluyen parasitosis, neoplasias, cuerpos extraños y enfermedades endocrinas, por lo que es muy importante que al momento de manejar las otitis de nuestras mascotas consideremos que hay algo de base que la puede estar causando.
Los factores predisponentes son aquellos que favorecen el desarrollo de otitis externa, pero no la generan por sí solos. Un ejemplo de esto es la conformación del canal auditivo externo, el aumento de la humedad y temperatura, traumas y enfermedades obstructivas del oído.
Por último, los factores perpetuantes, los cuales debemos tratar específicamente, son aquellos que exacerban la enfermedad e impiden la resolución de ésta, como por ejemplo las bacterias y levaduras. Es importante saber que el canal auricular externo de nuestras mascotas contiene bajos números de bacterias y levaduras residentes normales. Sin embargo, en algunas circunstancias pueden ser patógenos oportunistas que agravan los signos clínicos, la progresión y permanencia de la enfermedad, convirtiéndose así en factores perpetuantes.
Tratamiento:
El tratamiento de una otitis externa debe ser integral y siempre debe considerar la causa primaria para lograr que el tratamiento no falle. Una vez que estamos tratando la causa de base debemos tratar también el factor perpetuante y según eso se elige el tratamiento adecuado ya sea para bacterias o levaduras. Es importante considerar que algunas bacterias son más resistentes al tratamiento que otras, por lo que es importante siempre evaluar el tratamiento con un veterinario.
Tips:
Siempre que nuestra mascota presente otitis debemos llevarla al veterinario para que evalúe que tratamiento realizar.
Siempre hay algo de base por lo que no basta con solo tratar el factor perpetuante, sino también la causa primaria.
Normalmente las otitis están asociadas a alergias, por lo que un buen tratamiento de soporte incluye baños, desparasitaciones y en algunos casos incluso un cambio de alimento.
Limpiar el oído y mantenerlo libre de secreción ayuda a evitar que las otitis sean recurrentes, para esto existen limpiadores óticos libres de medicamentos.
*** Escrito por Dra Maria Jose Aguirre, médico veterinario, especialista en
dermatología veterinaria.